#LonelyPaCO con Naide Nóbrega: El Camino que vive en mí

672

Esta mañana, mi compañero Juanpa Ausín y yo tuvimos el privilegio de recibir en nuestro programa Viva Palencia Viva, en Acup Radio, a Ángel Luis Barreda, presidente de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Palencia desde hace un montón de años y peregrino de seis Caminos. También tuvimos a la historiadora Cristina Párbole hablándonos del Camino Olvidado, una ruta jacobea por la Montaña Palentina que verdaderamente hace honor a su nombre. Tratar del tema con nuestros invitados me inspiró para este encuentro mensual por aquí. Decidí hablaros un poquito sobre esta ruta tan transformadora que para un extranjero es una importante marca de España.

Y es que estamos en la época precisa. Es exactamente después de la Semana Santa cuando los peregrinos empiezan a llegar. Es cuando empezamos a venir los guiris, sobre todo, para una experiencia que, estoy convencida, la gran mayoría de los que dan el primer paso no tiene ni idea de cuánto significará para su vida.

Otro día, también en Acup Radio, la presidenta de la Diputación, Ángeles Armisén, nos comentaba que el Camino puede ser considerado la primera gran red social. Donde personas de diferentes nacionalidades, culturas y costumbres ya se encontraban siglos atrás y dividían su sabiduría, además de compartir ese sentir peregrino que invade a todos los que se lanzan a esta preciosa aventura.

Apenas con mi mochila, un par de botas y el cayado, tuve la oportunidad de hacer el Camino sola por tres veces. La última en 2007, desde Le Puy (Francia) hasta Finisterre. Cerca de 1.600 kilómetros andados en puro agradecimiento por aquello en lo que me había transformado después de las experiencias anteriores. Conocí, desde muy cerca, esta red social donde el estar desconectado es precisamente lo que te hace conectar con lo más importante. En mi primer Camino, en noviembre de 2000, con apenas 25 años, no vine a encontrarme, como dicen los más místicos, ni a agradecer, ni nada. Venía a hacer kilómetros y conocer, de forma barata y simple, parte de un país que aprendí a amar cuando era adolescente en clases de español. ¡Qué equivocación mía pensar que sería sólo esto! Tanto suelo y tanta nieve como encontré en aquel duro comienzo de invierno serían clases de vida, terapia y conocimiento.

Suelo decir que el Camino no es mágico en sí mismo. La fórmula de la felicidad no está en la concha que lleva el peregrino o en la Compostela que recibe al final. Las respuestas que quizás busques no estarán esperándote colgadas en las flechas amarillas. Pero si te propones una interiorización, descubrirte en tus silencios y en tu ritmo (aunque hagas una verdadera familia de amigos o camines con alguien), sí, la magia se verá. Aprenderás cosas sobre ti, sobre las personas y sobre el mundo. Encontrarás respuestas. O tal vez más preguntas. Aprenderás que por mucho que sepas, no sabes casi nada. Mientras, también descubrirás que sabes y que eres mucho más de lo que crees. Puede parecer una paradoja. Y lo es. Pero son cosas del Camino. Y eso, compañeros, sólo se aprende paso a paso.

Os invito a aprovechar esta temporada y caminar. Estamos en plena ruta. Somos la meseta. Somos Camino. Frómista, Carrión, Villasirga, Palencia, vuestra casa. Es decidirse y echar a andar.

¡ Buen Camino!

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here