No hay relación más intensa que la de una madre y una hija. Eva Garrido y Pilar Bayón la relatan a través de un cuento ilustrado entrañable, a caballo entre la fantasía y la autobiografía.

Presentación, con lectura, exposición y música en directo, en la Biblioteca Pública el 18 de marzo a las 12,30h

Ese cuento que mamá narra a la niña para alejar sus miedos nocturnos y conducirla al mundo de los sueños, ese lenguaje universal basado en la fantasía y las emociones, es el medio que las protagonistas de El Espejo de la Princesa adoptan para comunicarse en la distancia. La niña, en esta ocasión adulta, emancipada y madura, y la madre, que observa en la distancia cómo su hija alza el vuelo hacia la vida, construyen un entrañable relato lleno de ternura y experiencias en torno a la relación materno filial y, en definitiva, las relaciones humanas. Una relación en espejo que se transmite de abuelas a hijas, y a nietas.
Eva Garrido (la hija) y Pilar Bayón (la madre) escriben y protagonizan este libro, un relato que se mueve entre la fantasía y la autobiografía, enriquecido -si cabe- con las ilustraciones de Krisoa. Y ambas estarán en la Biblioteca Pública de Palencia el sábado 18 de marzo a las 12,30 horas, conduciendo un acto de presentación del libro diferente y original.
Del mismo modo que el libro no puede encasillarse en un género concreto -autobiográfico, epistolar, cuento…-, ni tampoco etiquetarse con un solo término -poético, pedagógico, filosófico o fantástico, entre otros-, la presentación del libro es un evento con entidad artística propia. En él se expone una veintena de ilustraciones del libro y se disfruta de las composiciones al piano de Pablo Casal, inspiradas en el texto e interpretadas en directo por el autor.
Y por supuesto se lee y se habla del relato, aunque eso es lo de menos: es la excusa para reflexionar sobre la intensidad de las relaciones humanas y los infinitos lazos paterno filiales.
Es un acto vivo, donde se reflexiona y se siente a través de la música, la imagen y la palabra. “El feedback que recibimos es muy intenso.
La gente se sorpende con el formato, empatiza y transmite su propia visión de las relaciones entre madres e hijas”, indica Eva Garrido.

 

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